Datos surgidos de documentos sobre los planes de Donald Trump para alterar la votación en que perdió la presidencia revelan aspectos hasta ahora desconocidos. El ex-presidente se quejó aún antes de la elección de posibles irregularidades que lo harían perder. Al parecer, según datos dados a conocer en varios medios de prensa, el Coronel Phil Waldron, asignado a la Casa Blanca fue el primero en notar «irregularidades» en las máquinas de votación, lo que podría indicar fraude electoral. Al ser informado el ex-presidente Trump ordenó que su abogado personal buscara como revertir la votación en su contra. Rudolph Giuliani habría buscado el apoyo del Departamento de Seguridad Interna, sin ningún éxito, De ahí pasó a buscar asistencia del Pentagono para usar a las fuerzas armadas, lo cual le fue negado. Posteriormente se buscó la ayuda del Departamento de Justicia, donde también fue rechazada su petición. Todas estas medidas eran para que se confiscaran las máquinas de votación como evidencia de un supuesto fraude. Se decia, por parte de personas cercanas al ex-presidente, que las máquinas habían sido alteradas para afectar su esfuerzo por seguir en la Casa Blanca. Ninguna de las quejas de fraude electoral han podido ser confirmadas hasta ahora.